Esta iniciativa busca corregir los desequilibrios existentes, donde algunos trabajadores autónomos, al no estar en el régimen simplificado para pequeños contribuyentes (monotributo), soportan una carga impositiva más alta en comparación con empleados asalariados que tienen ingresos similares. Según datos del Ministerio de Economía, un autónomo soltero que gana lo equivalente a 15 salarios mínimos mensuales paga alrededor de $5.600.000 al año en concepto de impuesto a las ganancias, mientras que un empleado asalariado no paga esta carga.
En virtud de ello se diseña un esquema de simplificación tributaria que se aplicaría en un primer momento para personas humanas , es decir profesionales, prestadores de servicios y comerciantes, que revisten actualmente la categoría de autónomos pero que no tengan ingresos mensuales superiores a los 15 salarios mínimos vitales y móviles. Asimismo, se está evaluando la posibilidad de ampliar el régimen a las micro y pequeñas empresas con hasta 3 empleados.
Según datos oficiales, actualmente están inscriptos como autónomos 987.000 personas según el siguiente detalle: 286.000 (29%) son directores de sociedad anónima; 364.000 (37 %), comerciantes; 337.000 (34%), profesionales y prestadores de servicios.
Para los autónomos comerciantes, profesionales y que prestan servicios, el esquema "Simple" implicará que puedan optar por este régimen simplificado con las siguientes características: será un régimen distinto al de monotributo; con un único pago mensual, que abarque seguridad social, IVA y Ganancias y el pago se determinará como un porcentaje de la facturación.
Como se puede observar está pensado como un esquema intermedio entre los monotributistas y los profesionales y comerciantes de mayores ingresos.
Esto les permitirá evitar el salto que implica pasar del monotributo al régimen general.
Según estimaciones, este nuevo régimen implicará una reducción significativa de la carga tributaria para los autónomos que se inscriban en en el mismo. En concreto, se estima que los beneficiarios del “ Simple” pagarán entre un 20% y un 30% menos de impuestos que los autónomos que actualmente se encuentran en el régimen general.
Conclusión
Sin dudas que una reducción en materia fiscal trae aparejado consecuencias positivas para los contribuyentes y por ende para la economía, particularmente este régimen podría contribuir a la formalización del trabajo autónomo y a la generación de empleo, además quienes se beneficien de este régimen podrían disponer de mayores recursos para invertir, como consecuencia de la reducción en la carga fiscal. Sin perjuicio de ello, es importante remarcar que el nuevo régimen simplificado tributario es un proyecto de ley que aún no ha sido aprobado por el Congreso, por lo que se desconoce cuándo se implementará y si se implementará. Será en el año 2024?
Ramiro Montes
Contador Público
Magister en Administración de Empresas
Miembro de la Asociación Argentina de Estudios Fiscales